Por Lula Fernández.
Para que una marca -la que sea- crezca y sea conocida ya no basta con pagar buenas publicidades gráficas o con filmar una publicidad interesante por año para la televisión. Los medios tradicionales son aún sumamente necesarios pero ya no son el único lugar al que una marca puede ir a contactarse con sus consumidores.
Hoy en día existen las redes sociales, los smartphones y las compras online. El mundo avanza segundo a segundo y todos, desde Coca-Cola hasta el almacén de la vuelta de tu casa, pueden sacar provecho de tener presencia en las redes.
Claro que esto es un arma de doble filo: si estás en Facebook, o en cualquier otra red, estás a la vista de todos. Para bien y para mal. Los aciertos serán doblemente festejados, pero los errores doblemente castigados. Por esto es importante que la estrategia y manejo de redes queden siempre en manos de los que más saben, los que se formaron para eso y los que están al tanto de las últimas tendencias digitales.
Lo que Instagram tiene para ofrecerle a tu marca por ejemplo no es igual a lo que tiene Facebook. Su sistema de etiqueta por #hastahgs permite llegar más fácilmente a usuarios interesados en temas puntuales y su avanzado editor de fotos posibilita subir imágenes de una gran calidad sin necesidad de recurrir a un fotógrafo.
Porque no, no todas las redes sociales se utilizan de la misma manera y no da igual cualquier plataforma para comunicar cualquier cosa, es importante entender cuál es la adecuada para tu marca y saber usar eso a tu favor.